La inflación de México se desaceleró en septiembre al registrar una tasa anual de 6.35%, por debajo del 6.66% que reportó en agosto pasado, cuando alcanzó su nivel más alto desde mayo de 2001.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) también publicó que el índice de precios aumentó 0.31% en en el noveno mes del año, frente al mismo periodo del mes anterior.
Los datos correspondientes en el mismo mes del año anterior fueron de 0.61% mensual y de 2.97% anual.
Desde enero de este año, la inflación se ha colocado por encima del objetivo 3.0 +/- 1 punto porcentual fijado por el Banco de México (Banxico).
“Tomando en cuenta una inflación de 6.35% al mes de septiembre, un tipo de cambio de 18.60 pesos por dólar y considerando que la Fed sube su tasa de referencia en diciembre, la probabilidad de que Banco de México también suba su tasa de referencia bajó de 70% a 66%”, señaló Gabriela Siller, directora de Análisis Económico Financiero de Banco BASE.
El Inegi también indicó que la inflación subyacente creció 0.28% mensual y 4.80% anual; en tanto que la no subyacente reportó un incremento mensual de 0.41% y de 11.28% anual.
Al interior del índice de precios subyacente, el subíndice de las mercancías subió 0.33% y el de los servicios 0.24%. Dentro del no subyacente, los productos agropecuarios retrocedieron 0.06%, mientras que los precios de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno crecieron 0.72%.
A finales de septiembre, el banco central mantuvo su tasa de referencia en 7% citando expectativas de que los efectos de los sismos y huracanes que azotaron al país recientemente serían temporales y moderados sobre la actividad económica y la inflación.
La entidad dijo que la inflación general parecía haber alcanzado su techo, y que esperaba que mantuviera una tendencia
de baja.
En su reciente encuesta a economistas consultados por el Banxico aumentaron a 6.30% su previsión de inflación para México al cierre de 2017.
Fuente: Forbes