A 33 años del terremoto del 85 y a un año del ocurrido en 2017, recordamos a un México fuerte, que a pesar de los problemas ideológicos, políticos, económicos y sociales, ha prevalecido ante la tragedia. En esos momentos pertenecer a una generación diferente, las ocupaciones o creencias no fueron una limitante para que niños, adultos, adolescentes y hasta mascotas, marcaran pauta y brindaran un apoyo total a las personas más necesitadas.
Para reconocer a las personas que apoyaron y conmemorar a las víctimas de estos desastres naturales te invitamos a que visites esta emotiva exposición que nos invita a no olvidar que México es un país unido que sabe levantarse en situaciones difíciles y esta muestra resalta precisamente eso, la honestidad, la valentía, la perseverancia y lucha de hombres y mujeres que trabajaron para ayudar durante la catástrofe de hace un año.
La exposición se titula “Sismos 1985-2017. De los escombros a la esperanza”, y es una retrospectiva sobre los terremotos del 19 de septiembre, en el que se refleja la solidaridad de los mexicanos. Esta muestra es resultado del trabajo conjunto de fotógrafos, periodistas, personas que trabajaron en las brigadas, rescatistas y organizaciones como Fundación Zurich, OXFAM México, SkyAlert y Fideicomiso Fuerza México.
En ella se exhiben materiales gráficos, audiovisuales y textos inéditos. Se divide temáticamente de la siguiente forma: “19 de septiembre de 1985”, “Surgimiento de la sociedad civil”, “2017: una ciudadanía proactiva”, “Los medios en 1985 y en 2017” y “Memoria 19-S”.
Dónde: Piso de exposiciones temporales del Museo Memoria y Tolerancia (Av. Juárez 8, Col. Centro).
Fecha: 1 de septiembre al 31 de octubre de 2018; martes – viernes, 9:00 a 18:00; sábado y domingo, 10:00 a 19:00.
Costo: Público en general a partir de 15 años, $30; estudiantes, maestros e INAPAM, $15.
Te recomendamos visitar esta exposición que nos invita a reflexionar sobre la importancia del apoyo y del trabajo realizado por esos héroes sin capa que velaron por docenas de familias rescatando personas, removiendo escombros, preparando almuerzos, supliendo personal para cuidar de los heridos, así como las guardias extensas que realizaron para cuidarse unos a otros.
¡Valoremos lo bueno de México!