El marketing visual es una estrategia para estimular las ventas en los establecimientos, a través de un montaje atractivo, bien organizado y congruente con tu marca.
Todos hemos estado en tiendas de las que, simplemente, no nos queremos ir. A veces sin saber por qué, vivimos estas visitas como experiencias agradables, realizamos compras impulsivas y nos hacemos clientes asiduos sin siquiera haber comparado los precios con la competencia.
Es un reto lograr que los ambientes evoquen placer y otras emociones positivas, utilizando elementos como la organización, la iluminación y el diseño. La buena noticia es que todos los comercios pueden aprovechar esta capacidad para fomentar la lealtad de los clientes, incrementar las ventas y fortalecer la marca.
El merchandising o marketing visual es “la estrategia de implementación visual para generar una experiencia al cliente, con el fin de hacer un ‘engagement’ y compartir nuestra marca a través de temas visuales”, explica Alejandro Mena, director de la agencia de marketing experiencial AM Planning.
“Este vínculo generado a través de esta práctica es de suma importancia, ya que nuestro cliente sentirá y experimentará emociones con los montajes. Es una forma alterna donde la marca le habla a nuestros usuarios de manera visual”.
Impulsa la rentabilidad de la tienda
“Al realizar un montaje para que nuestra marca hable de manera visual a nuestros clientes, se genera una emoción. Esto hace que el customer journey sea de mayor agrado, que se genere una mayor estancia con nosotros y haya un potencial aumento de ventas”, comenta Alejandro Mena.
El montaje visual de las tiendas debe atraer las miradas para capturar a los clientes nuevos y retenerlos en el establecimiento. “Siempre en un retail, el primer contacto con el cliente es una imagen o un montaje agradable para invitarlos a permanecer”.
Guía al cliente por el punto de venta
Los consumidores suelen seguir patrones para moverse por una tienda. Identificar estos movimientos es crucial para conocer el customer journey y entender las peticiones y experiencias que los clientes están buscando vivir en la tienda, advierte el especialista en mercadotecnia y planeación de eventos.
Con esta información, la tienda debe elaborar un planograma para señalar dónde estarán ubicados los productos, en función de los movimientos de los clientes.
“Si nosotros queremos incentivar un espacio frío, necesitamos atraer la atención con algo que esté buscando nuestro consumidor final o algo que esté presentado de manera atractiva tanto en lo visual como en lo comercial”, refiere Mena.
Por ejemplo, las islas se utilizan para colocar las promociones y dirigir la circulación de los usuarios. Los espejos crean “puntos calientes”, es decir, puntos de atracción que se pueden aprovechar para acomodar los productos más rentables.
Logra que la marca hable
El diseño y creación del visual merchandising debe estar unido a la marca, enfatiza Alejandro Mena. “Debemos ser cautos con este tema en particular, ya que en ocasiones por innovar o tratar de experimentar algo nuevo, podemos ser disonantes y afectar a nuestra marca madre”.
Los valores, identidad visual e identidad verbal deben normar el merchandising. El objetivo es que al un elemento aislado, el cliente sepa que la marca “está hablando”, señala el director de AM Planning.
Anuncia ofertas sin abrumar al cliente
El merchandising debe responder a una estrategia integral de comunicación que, además de expresar los valores de la marca, genere emociones en los clientes. Con integral, Mena se refiere a una propuesta que utilice todos los medios disponibles, además del marketing visual.
Si la organización y diseño de la tienda responde a las necesidades y deseos de los consumidores, éstos nunca se sentirán abrumados. Las emociones serán positivas y la marca dejará un impacto, explica el especialista, quien redondea: “lo importante es ser estrategas, no reactivos”.
Caja de herramientas
- El planograma: Es una representación ilustrativa de cómo debe acomodarse cada producto en los anaqueles. Los artículos más populares deben estar a la altura de los ojos. Abajo irán los de menor rotación.
- El customer journey map: Es un mapa de seguimiento donde se aprecia el recorrido que hace el cliente en la tienda, sus interacciones y encuentros con los productos.
- Los puntos de atención: La tienda debe despertar el interés del cliente, a través de escaparates, islas, promociones en la caja y puntos atractivos para anunciar la promoción madre.
Por: Alejandro Mena, director de AM Planning para Experto Pyme.