Algunos de los riesgos para la inflación ya se materializaron, como el tipo de cambio, gasolinas caras y negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); aunado a que el balance de riesgos de este índice ya se deterioró, por lo cual, la convergencia a la meta que se impuso el Banco de México (Banxico), de 3.0 por ciento, se podría afectar.
En las minutas de la reunión del Banxico el pasado 21 de junio, la Junta de Gobierno señaló que estos factores fueron por los que se decidió endurecer su política monetaria e incrementar en 25 puntos base el objetivo de la Tasa de Interés Interbancaria, para colocarla en 7.75 por ciento.
Es importante recordar que de acuerdo con los datos que ha dado a conocer el organismo, la meta del Banxico es que los niveles de inflación lleguen a un nivel de 3.0 por ciento al cierre de este 2918; no obstante, con la posibilidad de que los riesgos incrementaran, se refirió que esta meta se podría alcanzar hasta el transcurso del próximo año.
Según el documento que dio a conocer hoy el Banco Central, la mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno destacó la necesidad de mantener una política monetaria prudente y todos coincidieron en que, ante un entorno más adverso, es indispensable una respuesta de política monetaria para evitar un desanclaje de las expectativas de inflación, evitar efectos de segundo orden y procurar la convergencia de ésta a su meta.
Asimismo, todos los miembros de la Junta de Gobierno coincidieron en que la inflación general anual continuó disminuyendo, al pasar de 4.55 por ciento, en abril, a 4.51 por ciento en mayo; no obstante, algunos señalaron que en este último mes la inflación general moderó el ritmo con el que venía cayendo desde enero pasado.
En general, el Banco reiteró su preocupación por el proceso de modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y los riesgos que podría generar si ese proceso se extiende más de lo que debería. Además de algunas medidas proteccionistas implementadas por el gobierno estadounidense que, sin duda, pueden afectar la trayectoria de los precios al consumidor en el país.
Y es que otro riesgo que amenaza la tendencia a la baja de los precios al consumidor está relacionado con las tarifas arancelarias a las importaciones de acero y aluminio impuestas por Estados Unidos hacia otras naciones, entre las que se encuentra México y China.
“La mayoría (de la junta de gobierno) apuntó que ante las acciones de política de comercio exterior de Estados Unidos se ha acrecentado el riesgo de presiones inflacionarias derivadas de un escalamiento de medidas proteccionistas y compensatorias”, agregó.
Banco de México, además, dijo que otra presión para el tipo de cambio en el país es la trayectoria de la política monetaria en Estados Unidos, pues espera que la Fed aumente las tasas.
Fuente: La razón