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Vender es mucho más que sólo ganar dinero a cambio de productos o servicios, es motivar a las personas para que cubran sus necesidades con lo que tú ofreces.

Allí reside la importancia de saber vender, de conocer a la perfección lo que vendes, para que puedas responder todas las dudas que tus clientes puedan tener y hacer frente a la competencia.

El pilar más importante de cualquier empresa lo componen las ventas, independientemente del giro al que te dediques, puesto que desde una tienda de abarrotes, hasta una compañía de telecomunicaciones, requiere vender sus productos o servicios.

Por lo anterior, debes seguir una serie de pasos imprescindibles para que cada día el número de ventas que realices se incremente. Produciendo ganancias y además cubriendo una necesidad para quien te está comprando.

Recuerda que antes de salir al mercado con bombo y platillo debes tener bien definida la imagen corporativa de tu empresa, no importa qué tan pequeña sea, que las impresiones son muy importantes y el profesionalismo se nota desde distancias largas, por lo que debes ser muy serio a la hora de emprender tu propio negocio.

 

1. Conoce tu producto/servicio

Aunque puede sonar muy obvio, el primer paso para cerrar una venta es la de conocer cada detalle de lo que estás vendiendo, de esta forma, podrás responder a todas las dudas o preguntas que te haga el cliente, quien tendrá más confianza para adquirirlo.

Cuando estés con un cliente, escúchalo atentamente, con sus dudas y sugerencias, podrás hacer mejoras a tu producto o servicio o a la misma estrategia de ventas.

 

2. Establece metas

Es importante conocer tu inventario, si aún no tienes control sobre cuántos productos tienes o cómo agendas tus servicios, ¡comienza a hacerlo! Así podrás llevar tus propias estadísticas.

Con base en esto, es necesario también que te apliques y te pongas metas diarias, semanales y mensuales; con la base de datos que llevas, podrás hacer las mediciones y establecer estrategias para mejorar. Si no llegaste a tu meta, podrás hacer una planeación estratégica para que las puedas cumplir.

 

3. Conoce a tus clientes

Así como es importante conocer a la perfección lo que ofreces, es igual de importante saber a quiénes les vendes: Quiénes son, qué los motivo a comprarte a ti y no a la competencia, dónde viven, qué les gusta, etc. Cualquier dato puedes ser muy valioso para tus estrategias.

Cada vez que elabores una venta, solicita sus datos: correo electrónico y teléfono, esto te permitirá elaborar una base de datos, que te será muy útil para futuros eventos, lanzamientos o promociones especiales que consideres de importancia para ellos.

 

4. Haz marketing

Desde el nombre del producto o servicio, su presentación, cómo lo promocionas y hasta cómo lo ofreces cuenta mucho a la hora de vender. Todo esto se contempla dentro de la estrategia de marketing, encargada de dar a conocer la empresa a tus clientes potenciales y de retenerlos cuando llegan a él.

Se trata de dar a los clientes razones para que quieran regresar a tu empresa, que se sientan a gusto en ella y para que te recomienden con sus amigos. No te olvides de lo básico: ofrecer un producto de calidad acompañado de un buen servicio al cliente.

No temas a invertir en publicidad, si no das a conocer tu negocio, nunca se enterarán de que existe. Contempla dentro de tu presupuesto mensual una partida para promocionarlo a través de diferentes medios; desde volantes para repartir en la calle, hasta campañas en redes sociales, donde resultan muy accesibles y llegan al público que deseas.

Crea tu propio sitio web y publica en él información de interés para tu mercado. También puedes ofrecer descuentos y ofertas exclusivas para tus lectores.

 

5. Capacita a tu personal

Lo mejor que puedes hacer por tu empresa es capacitar constantemente a quienes trabajan contigo; un colaborador que está el día en los temas de interés, es tu mejor aliado para que tu empresa cada día venda más.

Los incentivos también harán que tus ejecutivos de venta “se pongan las pilas”, ¿quién no desearía el bono extra a fin de mes?

 

6. Identifica a tu competencia

Analiza tu oferta frente a la de la competencia, ¿qué diferencias hay? Si estás comenzando, es muy probable que a tu competencia le vaya mejor que a ti, analízala, observa sus estrategias, descubre sus puntos fuertes y cuáles son los débiles, básate en esta investigación para evitar cometer los mismos errores y satisfacer a los clientes. Si es necesarios, siempre es bueno hacer alianzas, ambos se beneficiarán.

 

No esperes más y pon en práctica estas sugerencias, pero si te quedan dudas, recuerda que la Cámara de Comercio de México tiene a tu disposición talleres, cursos y conferencias que te ayudarán a mejorar en las áreas que tu empresa necesita para crecer.

 

¡Acércate a nosotros!

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