El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, de la Cámara de Diputados, señaló que para 2018 la contratación de deuda pública se ha orientado al fortalecimiento del mercado interno, a la diversificación de las fuentes externas de financiamiento y a mantener un bajo nivel de riesgos en el portafolio de pasivos del gobierno federal.
Lo anterior, en línea con la estrategia de consolidación fiscal, la cual establece que el financiamiento del gobierno federal deberá contratarse en condiciones favorables, es decir, a costos reducidos y bajo un horizonte de largo plazo.
En el documento “Avance del Endeudamiento Aprobado para 2018”, el CEFP precisó que durante el primer trimestre de 2018, la emisión de deuda para financiar el gasto público se sustentó en las estrategias establecidas en la política de crédito público, la cual consiste en aprovechar las oportunidades y/o ventajas financieras de los mercados, así como la menor variabilidad de las tasas de interés, la inflación y el tipo de cambio.
Si bien estas medidas pudieron contribuir al logro de alcanzar un mejor perfil del endeudamiento, al cierre del primer trimestre el gobierno federal utilizó ya 81.6 por ciento del techo de endeudamiento externo aprobado para el 2018, por lo que su margen para endeudarse es ahora de sólo 18.4 por ciento para el periodo abril–diciembre.
Argumentó que en caso de que el comportamiento de estas variables no haya sido la causa del endeudamiento creciente, habría que estar al pendiente sobre el flujo neto de emisión de deuda externa por parte del gobierno federal para evitar un posible sobreendeudamiento.
El CEFP mencionó que durante el primer trimestre de 2018, las Empresas Productivas del Estado (EPE) aprovecharon la mayor estabilidad del mercado interno, lo que hizo que al cierre del primer trimestre reportaran un endeudamiento neto interno de 15 mil 77.8 millones de pesos, lo que representa el 45.3 por ciento del techo de endeudamiento aprobado para 2018.
Esto indica que se debe poner especial atención en el flujo neto de endeudamiento de las EPE de los próximos meses, para evitar que su endeudamiento interno supere el techo aprobado para 2018 por el Congreso de la Unión.
Uno de los factores que pudieron influir en el creciente endeudamiento, tanto del gobierno federal como las EPE, podría estar asociado a las mejores condiciones financieras de contratación de deuda registradas en el primer trimestre de 2018, tras la reducción en el nivel de las tasas de interés de largo plazo de los bonos a 3, 10, 20 y 30 años; además de la menor variabilidad del tipo de cambio y de la inflación, explicó.
Fuente: México Nueva Era