Las tarjetas de Crédito pueden ser muy útiles, siempre y cuando se haga un buen uso de ellas, de lo contrario, pueden jugar en nuestra contra y hacernos pasar más de un dolor de cabeza.
Son opuestas las visiones que se tiene sobre las tarjetas de crédito. Pero es una gran herramienta cuando se les da un buen uso. En realidad, llevar un buen historial es sencillo, lo único que se debe hacer es pagar a tiempo y no adquirir más deudas de las que se pueden llevar.
Sin embargo, existen las personas que lo ven como una extensión de sus ingresos. Esto les acarrea grandes problemas, por la acumulación de todas las comisiones e intereses.
La comparadora de crédito, ComparaGuru.com, te dice cuáles deberían ser los 10 mandamientos para utilizar una tarjeta de crédito.
- Totalero sobre todas las cosas. Un buen totalero sabe que pagar el mínimo alarga la deuda hasta por 10 años. Lo recomendable es cubrir la totalidad de las compras mensuales y así evitar intereses.
- No tomarás promociones en vano. Aunque las promociones estén muy buenas y el descuento sea lo más increíble del mundo, es necesario pensar si lo necesitamos o no ese producto.
- Sacrificarás las compras innecesarias. No importa si en todos los almacenes hay ofertas y rebajas, lo que realmente importa es si tenías contemplada la compra de algunos productos en promoción.
- Honrarás los días de pago. Este día debe ser tomado en serio, de lo contrario terminarás por pagar intereses por olvidar esta fecha.
- No te endeudarás más del 30%. Según los expertos financieros, las deudas no deberán sobrepasar la tercera parte de tus ingresos, pues ello te permitirá cubrir todos los otros rubros sin ahorcarte.
- No comprarás por impulso. Nos gusta estrenar, pero aquí aplica la misma regla: si no lo necesitas no los compres.
- No prestarás tu tarjeta de crédito. Esta es una de las formas más absurdas de endeudarse, porque ni siquiera recibes el beneficio. Mejor opta por el “cuentas claras, amistades largas”.
- No mentirás sobre tu historial crediticio. El historial permite a los otorgantes conocer si eres o no pagador, también, les hace saber cuándo ya no es posible prestarte más porque tu capacidad de pago no es suficiente.
- No desearás más de lo que puedes pagar. La raíz de todo mal historial es la falta de pago de cosas que no costear. Siempre reflexiona sobre si eso que quieres lo puedes pagar holgadamente.
- No codiciarás los meses sin intereses. Hacer demasiadas compras a meses sin intereses puede llevarte a la quiebra, pues se trata de una deuda que se debe pagar, se acumula y no reduce.
Fuente: Excélsior