A cuatro meses de que entrara en vigor la reforma fiscal de Estados Unidos, expertos consideraron que aún no es claro su efecto en la economía mexicana, toda vez que la inversión estadounidense al país tuvo un ligero repunte en el primer trimestre de 2018 y la actividad industrial se mantuvo sin sobresaltos.
En los primeros tres meses del año, ingresaron 4 mil 143 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED) provenientes de Estados Unidos, cifra ligeramente mayor que la preliminar reportada en el mismo periodo de 2017, de 3 mil 973 millones de dólares, según la Secretaría de Economía.
En tanto, el INEGI reportó que el indicador de la actividad industrial en marzo no presentó variación respecto al mismo periodo de 2017; al interior, la industria manufacturera creció 3.4 por ciento anual.
Félix Boni, director general de Análisis de HR Ratings, dijo que es complicado distinguir el efecto de la reforma en las decisiones de los inversionistas, pues los planes de expandir los negocios están determinados por la reforma fiscal, pero también por la renegociación del TLCAN y las elecciones en México.
“No tenemos aún información que pueda dar elementos para analizar un impacto de la reforma fiscal en EU, sin embargo, en este momento el efecto no ha sido muy fuerte y las empresas no van a salir de México de forma rápida”, apuntó.
Enrique Hernández, socio fiscal internacional de la firma Procopio, aseguró que las empresas de EU en México no han cambiado mucho sus planes, sino que han revisado sus estructuras para hacerlas más eficientes y tomar ventaja de algunas nuevas disposiciones como el nuevo régimen de exención de dividendos de subsidiarias extranjeras.
Fuente: El Financiero