De Canaco CDMX para el mundo: cancelación de estampilla postal

Bajo el cobijo del Palacio Postal, iluminado en tonos azules y rosas y amenizado por un cuarteto de cuerdas que interpretaba el Bolero de Ravel, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco CDMX) protagonizó un hecho histórico: la emisión y cancelación de la estampilla postal que simboliza 150 años de dedicación y logros; 150 años al servicio de México.

Enmarcado por sus escalinatas, el palacio dio la bienvenida a los integrantes del Consejo Directivo de la Cámara de Comercio de la Ciudad de México, quienes pacientes aguardaban su turno para obtener un recuerdo del inolvidable hecho que estaba por suscitarse.

Llegaba la hora de dar voz a los anfitriones de tal acontecimiento. Rocío Bárcena Molina, directora general del Servicio Postal Mexicano, externaba su emoción por ser parte de la conmemoración de los 150 años de la Cámara de Comercio de la Ciudad de México.

Su rostro expresó gran alegría cuando pronunció que los organismos empresariales, como la Canaco CDMX, le dan gloria a la patria y que gracias al sector empresarial se continúan enviando paquetes por mensajería.

Compartió con los presentes que los timbres postales son embajadores culturales del país que los emiten y que son los testigos silenciosos de la historia del mundo, porque permiten, a través de una imagen, grabar acontecimientos, personajes históricos, conmemoraciones y aniversarios como el que hoy nos reúne.

La audiencia se emocionó cuando la directora general del Servicio Postal Mexicano anunció que la estampilla conmemorativa quedará en la memoria histórica del país y del mundo, ya que recorrerá todo el país y cruzará las fronteras, recorriendo 191 países.

En su oportunidad, José de Jesús Rodríguez Cárdenas, presidente de la Canaco CDMX, se mostró agradecido con la directora del Servicio Postal Mexicano por otorgar a la institución el privilegio de contar con una estampilla conmemorativa. Asimismo, agradeció a todos aquellos que hicieron posible la emisión del timbre, haciendo una especial mención a Jorge Luis Paz Díaz, vicepresidente de Protección Civil en la Canaco CDMX, por su compromiso con la institución.

Al referir la historia del organismo empresarial, José de Jesús Rodríguez Cárdenas, destacaba la trascendencia que ha tenido la institución a lo largo de siglo y medio.

Con gran orgullo, expresó que nadie más que la Canaco CDMX en la historia de este país ha representado por tantos años al sector empresarial, “nadie con una permanencia y con una labor incansable de defender los legítimos intereses del comercio organizado de la Ciudad de México, como lo ha hecho la Canaco, siempre con el principio primigenio de “Mejor calidad de vida para todos los mexicanos”.

Señaló que llevar a cabo la conmemoración del 150 aniversario de Canaco CDMX en el Palacio Postal, convertía este acontecimiento en un hecho histórico, porque los timbres son un medio eficiente para difundir la cultura, para reflejar la riqueza histórica y la trascendencia de instituciones como la Canaco.

Y llegó el momento esperado, José de Jesús Rodríguez, presidente de Canaco CDMX   y Rocío Bárcena Molina, directora general del Servicio Postal Mexicano, llevaron a cabo el acto de cancelación del timbre postal conmemorativo. Mediante un sello entintado de rojo, los titulares de ambas instituciones colocaron sobre la estampilla, la fecha y lugar de emisión de la misma. Los integrantes del Consejo Directivo de la Canaco CDMX e integrantes de las estructuras replicaron el acto en varias ocasiones.

El acto protocolario culminó con la presentación de un video conmemorativo que narró la historia y trascendencia de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México durante estas 15 décadas. Ya colocados para la fotografía que dejaría de este hecho para la posteridad, los integrantes de la Canaco CDMX mostraron emocionados los timbres que previamente habían cancelado. La noche se lleno de luz y música, mientras una artista circense expresaba su destreza, dando color y alegría a la velada, misma que culminó con un coctel y deliciosos bocadillos.

Por Mariana Flores Acosta