Ciudad de México, 27 de septiembre de 2024.- Ante los destrozos e incendios provocados
por el llamado “Bloque Negro”, en contra de establecimientos comerciales, durante la
marcha por los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, el presidente de la Cámara
Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México, José de Jesús
Rodríguez Cárdenas, lamentó que la manifestación de la tarde de ayer fuera, de nueva
cuenta, infiltrada por grupos extremistas que no vacilaron en destruir establecimientos
comerciales, arrojar artefactos explosivos y saquear tiendas.
Dijo que desafortunadamente se adhirieron a esta marcha grupos de provocadores y
delincuentes disfrazados de anarquistas que, bajo el cobijo que da el anonimato, utilizaron
máscaras y pasamontañas para causar graves daños a los establecimientos comerciales,
sin que la policía pudiera o intentara detenerlos.
José de Jesús Rodríguez Cárdenas informó que, debido a la marcha, alrededor de 7000
establecimientos comerciales fueron impactados con una baja en sus ingresos que
globalmente arrojan un monto aproximado de 21 millones de pesos por concepto de ventas
no realizadas. En tanto, las pérdidas por los actos de violencia en contra de 40
establecimientos podrían llegar a los 34 millones de pesos.
El dirigente empresarial subrayó que es razonable la protesta pública por parte de los
padres de los estudiantes desaparecidos, pues se trata de una expresión ciudadana que
respetamos y compartimos, por lo que exhortamos respetuosamente a las autoridades del
nuevo gobierno mexicano para que realicen la investigación del caso, que permita a las
familias de los normalistas desaparecidos acceder a la justicia y terminar con años de dolor.
El presidente de la Canaco CDMX reiteró que, “no nos oponemos a las manifestaciones
pacíficas que exigen justicia, pero sí exigimos que las autoridades de la Ciudad de México
pongan un alto a los delincuentes disfrazados, porque ningún ciudadano respetuoso y
respetable arroja objetos incendiarios a sus semejantes o al patrimonio ajeno”.
Finalmente, reiteró su llamado a las autoridades para hacer valer el Estado de Derecho y
no tolerar actos vandálicos so pretexto de protestas sociales, que ponen en peligro la
integridad de las personas, los negocios legítimamente establecidos, el mobiliario urbano y
el patrimonio histórico de la ciudad.